Al corte de las 19:00 hrs, UTC-6, y con el 80% de las actas computadas, Hugo Aguilar Ortiz, abogado de origen mixteco, se perfila para convertirse en el nuevo ministro presidente de la SCJN. Entre las personas indígenas que han ocupado el cargo encontramos figuras de la talla de Benito Juárez, Ignacio Ramirez “El Nigromante”, e Ignacio Manuel Altamirano.
Según cifras oficiales, el 1 de junio de 2025, 13 millones de mexicanos salieron a votar para elegir a los perfiles que integrarán el nuevo poder judicial. El marco legal actual, establece que el candidato o la candidata que haya obtenido la mayor cantidad de votos en los comicios será quien ocupe la presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación durante los próximos dos años.
¿Quién es Hugo Aguilar Ortiz?
Hugo Aguilar Ortíz, de 52 años, es originario de la comunidad de San Agustín Tlacotepec, Oaxaca. Es licenciado en Derecho y maestro en Derecho Constitucional por la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca.
Desde sus primeros años como profesional del Derecho, Aguilar Ortiz se ha dedicado a la defensa de los derechos de los pueblos originarios. De 1989 a 1990 fue auxiliar en la Delegación de la Procuraduría para la Defensa del Indígena en la ciudad de Tlaxiaco, Oaxaca, en donde trabajó en la resolución de conflictos entre comunidades mixtecas y triquis.
En 1993 se afilió a una organización jurídica llamada Servicios del Pueblo Mixe A.C., desde donde contribuyó a la elaboración y defensa de 18 estatutos comunales.
En 1996 fungió como integrante del Cuerpo Asesor del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), y de ese mismo año y hasta 2010, se desempeñó como asesor y representante legal de 25 comunidades indígenas que enfrentaban conflictos agrarios; fue asesor de otras 15, en los enfrentamientos derivados de los desencuentros entre el Sistema Jurídico Indígena y el Sistema Jurídico Estatal.
Además, durante el sexenio de López Obrador, Ortiz Aguilar se desempeñó como titular de la Coordinación General de Derechos Indígenas del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas.
Un indígena en la Presidencia de la SCJN
Aunque los pueblos originarios de nuestro país llevan más de cinco siglos luchando por su autonomía, más recientemente, y a raíz del levantamiento del EZLN en Chiapas en 1994, el gobierno mexicano, primero el de Ernesto Zedillo y luego el de Vicente Fox, se vio obligado a promover y reconocer derechos políticos y civiles a las personas indígenas.
En 2001, en una reforma al art. 2 constitucional a la que el mismo Ortiz Aguilar contribuyó, se reconoció que México es una nación de carácter pluricultural que se sustenta originalmente en sus pueblos originarios. A pesar del incuestionable avance que significó, dicha reforma no pudo traducirse en una efectiva ni auténtica autonomía de los pueblos originarios del país.
Una deuda con los pueblos originarios
En los últimos seis años, se ha tratado de resarcir la histórica deuda que el Estado mexicano mantenía con los pueblos originarios. En 2021, el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador se disculpó con el pueblo maya y devolvió aproximadamente 45 mil hectáreas de tierra a los yaquis en Sonora.
La reforma en materia índigena y afromexicana enviada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, y aprobada con el paquete de reformas el año pasado, buscó enmendar las fallas de la de 2001, reconociendo a los pueblos indígenas como sujetos de derecho público con personalidad jurídica y patrimonio propio.
Si continúa con la línea profesional que ha mantenido a lo largo de 30 años, Ortiz Aguilar podría resolver, como juez constitucional, algunos de los más grandes problemas jurídicos a los que se han enfrentado los pueblos originarios mexicanos desde hace más de 100 años.
“Ya nos toca”, insistió varias veces el número 34 de la boleta morada, quien hoy está a un paso de ocupar la presidencia del máximo tribunal del país. Falta mucho por hacer, pero hoy algo en México está cambiando.
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